lunes, 26 de enero de 2009

Otra dedicada (gracias Miss Penny)

Miss Penny. Ya no somos los mismos, supongo que soy más vieja que tu y tal vez te vi en la U, alguna vez. en esas enormes jornadas cuando amaneciamos en la nave adormilados, con pintura en las manos y las uñas manchadas, listas para la marcha, sin comer ni dormir.
tenía un pantalón negro de cuero y un gabán de cuero corinto que usaba para esas actividades. con eso puesto podía dormir en la calle, en la 13 calle y segunda avenida en las noches eternas antes del viernes de dolores.
él y yo peleabamos por los espacios (lo seguimos haciendo), me tuve que ganar el derecho a ser líder, no a su servicio, a su lado, su igual, su compañera. Todavía recuerdo esa vez cuando me dijo "vos cortá pañoletas", pero ambos teníamos los mismos ideales (tal vez todavía los tenemos)
no me gusta admitir que estoy casi domesticada, que tuve que comprar sacos y zapatos de tacón, que me alisé el pelo y me maquillo todos los días y que tengo que sufrir por abrir la boca más de la cuenta... que no tengo un trabajo estable porque mis ideas se pasan de revolucionarias.
hay otras cosas.

gracias por este respiro de vida Miss Penny. yo también regresé a casa con mi madre, (sólo que llevaba compañía) y tuve la deliciosa experiencia de dejar de odiarla, de perdonarle toda su feminidad y verla como la mujer de su época que es, entender sus histerias y demás traumas, comprender porqué se dejó, por qué dejó todo, porqué no volvió a escribir. porqué vive como vive.
regresé sin madre, pero con una amiga, vieja y con dolores.
no sé si se murieron mis ideales, al menos ahora intento vivir como todo el mundo, en fin, algo dificil.
me hizo recordar miss penny, gracias

5 comentarios:

Miss Penny Lane dijo...

ay... dolor ya me volviste a dar... sólo agrego un poco de drama al asunto para reirme y que no me cueste tanto comentar...

Justo mi militancia más fuerte fue mientras tuve compañero. Uno de esos comandantes por mal carácter y mandón que por capacidad de mando...
Al terminar esa relación fue que empecé a darme cuenta que la lucha es muy otra. Que no tengo que estar en frente de la policía pidiendo a gritos que me maten para considerarme revolucionaria...
pero también me da mucho miedo acomodare, volverme pequeño - burguesa... esos miedos heredados que también nos inculca, y con qué saña, la izquierda...
en mi mente lo sé. soy revolucionaria porque quiero cambiar este sistema. pero no sé cómo... sé que lo que hago no es suficiente, pero me faltan ganas...
tantas cosas...

tu post me recordó La mujer habitada.. ese hermoso libro...

gracias por compartir... si algo agradezco de esta frialdad del internet son los blogs... cómo nos permiten abrir el alma y compartir cosas tan profundas sin siquiera conocernos las caras...
estoy agradecida...

el Kontra dijo...

Creo que muchos queremos cambiar el sistema y las estructuras, pero al mismo tiempo hay que comprenderlo bien porque varios nos hemos dado nuestro gran somatón.

Ya Patricia lo dijo muy bien, debe existir más disenso pues todos queremos un cambio pero diferimos en el camino a seguir y no estamos dispuestos a crear un camino juntos, sino que cada quien jala por su lado.

Saludos.

Nancy dijo...

No he llegado al blog de miss Penny porque voy en orden (de arriba a abajo), pero ya me picaron. Yo prefiero no hablar de militancias... comparto muchos sentimientos y pensamientos contigo, doctora, y con miss Penny

Anónimo dijo...

No he leido el blog de Miss Penny voy para alla...
gracias por compartir esto, ha sido en la lucha de uds mujeres que hemos podido (nosotras) abrirnos camino.
No podemos solucionar de un dia para otro... pero vaya si no fue un tremendo paso.

elbeto dijo...

la onda es que como dice miss penny: no hay que acomodarse, como diria mi viejita: es bueno sentir todavia que las hormigas te pican el culo,eso siempre te mantiene de pie...

un abrazo