sábado, 24 de julio de 2010

El petroleo está en tu vida....

Veníamos de regreso de Sayajché para Flores, llovía fuerte y casi no se veía nada en la noche cerrada y la lluvia tropical que realmente atonta. No sé quien de las compañeras señaló la columna de fuego en la lejanía, el rótulo de Perenco nos permitió identificar el campo Xan y la pequeña refinería donde la columna de fuego, similar al gran ojo de "el Señor de los Anillos" iluminaba la noche petenera con un resplandor bastante diabólico.
El aroma alrededor me recordó mi infancia, antes que se construyera el oleoducto, grandes cisternas llenos de crudo surcaban el país en dirección de la costa sur, el vecino de la casa de mi infancia era propietario de uno de esos camiones que estacionaba ocasionalmente frente a mi ventana, el olor del crudo me hacía toser y me dificultaba respirar aunque el camión ya estuviera vacío. Los vecinos molestos obligaron a que se construyera una salida expedita que impidiera el paso de camiones por el centro del pueblo, hasta que construyeron el oleoducto.
Muchos años más tarde, ya haciendo la práctica médica en Coban, recibimos a una familia de ladinos pobres que habitaban en las cercanías del pozo de Rubelsanto, estaban como locos, alucinaban y gritaban, los llevaron los vecinos que los vieron deambulando sin sentido: Madre, Padre e hijos adolescentes parecían estar drogados. sabíamos que era algún tóxico pero con las escasas herramientas que teníamos era imposible saberlo.
Dos días más tarde eran otros, ya no alucinaban y se veían mejor, entonces nos contaron que vivían cerca de un derrame de crudo, que el agua que bebían tenía "como aceite encima", que ellos limpiaban el agua, retirando el aceite con una cuchara y luego la bebían, estaban envenenados por hidrocarburos. Se fueron cuando estuvieron completamente lúcidos. Nunca supe más de ellos.
La gente de Petén dice que hay más tumores y cánceres cerca del pozo, que los derrames son inevitables, que alrededor de la refinería hay muy mal olor y vapores irritantes.
A nadie parece interesarle.
El gobierno de Alemania ofreció dinero a cambio de la selva, no vale la pena explorar y explotar cuando el costo supera tanto al beneficio. Ni las mineras, ni Perenco van a dar dinero para atender y cuidar a todos los discapacitados, cancerosos y enfermos que rodean su paraíso comercial, ¿cuanto vale su salud?, ¿cuanto dinero vale su vida?.
El petroleo es desarrollo, el petroleo está en tu vida... en la mía lo ha estado no de buena manera.

sábado, 17 de julio de 2010

Predicando...

Parece ser que, por algún atavismo, las personas necesitamos convencer a los demás de nuestra verdad y proclamarla por todo el mundo, ese es el origen de los cientos de evangelistas y misioneros que recorren el mundo hablando de su verdad. (aunque existe alguna religión que prohíbe explicitamente hacer adeptos)
Los que hemos huido de las religiones conservamos, sin embargo, el adiestramiento que se requiere para intentar convencer y lo utilizamos en lo que nos mueve el tapete, en mi caso, en la educación de personas acerca de cómo el género influye en la salud.
La última semana la pasé en Petén, y es interesante ver como se desmontan los conceptos y lo aprendido y se pueden encontrar nuevas rutas de entendimiento y comprensión del fenómeno salud-enfermedad, que no habían sido tomados en cuenta.
Normalmente asumimos que el sexo (la definición genética hombre-mujer) incide en la salud en tanto que, biológicamente, hay preponderancia de una u otra enfermedad que afecta más a un sexo que otro o, por cuestiones biológicas, es imposible que lo padezca el sexo opuesto (parto, aborto, cáncer de próstata).
Cuando hablamos de género, no hablamos de lo biológico sino de lo social, es allí donde una enfermedad predomina más en un género o en otro dependiendo de como se ha construido a ese hombre o mujer y cómo este responde a esa construcción social y por lo mismo, corre más riesgo de enfermar.
La propaganda (que no es tan buena) ha pretendido ligar la palabra "género" con "mujer" y todo lo que huela a género parece sospechosamente feminista, ese era precisamente mi papel en esta semana, hacer énfasis en que, tanto mujeres como hombres, no nacen: se construyen.
Ese tema lo he tocado antes aquí, con poca comprensión, pero tenemos que regresar a que el género es histórico: no es lo mismo ser mujer u hombre hoy, que lo que se consideraba la mujer ideal hace 50 o 100
años. El género es relacional por oposición: soy mujer porque no soy hombre y por eso no nos termina de gustar el personaje más andrógino (que no puede identificarse o clasificarse fácilmente) o los hombres y mujeres que, física o actitudinalmente no corresponden a lo que nos gusta llamar hombre o mujer, además implica una relación de poder entre unos y otras (uno guía y la otra sigue)
El género es contextual: no es lo mismo ser mujer en Guatemala, que serlo en Suiza, es institucional, se apoya en legislaciones (aún existe en la legislación guatemalteca situaciones donde las mujeres no pueden ejercer toda la ciudadanía, las mujeres reciben el voto mucho después que los hombres, etc)
y además, el género permite el análisis de las diferencias: vivimos diferente y nos enfermamos de forma diferente.
Me parece que, pese a la reticencia que el tema genera de entrada, nos fué bastante bien, aunque todavía hay camino que hacer.
Es interesante ver que, cuando no me fundamento en cómo el género afecta a las mujeres, sino que también hablo de las sobrecargas masculinas basadas en el género ( ocultar sentimientos y padecimientos, resolver las cosas a golpes, las adicciones son más toleradas e incluso incentivadas por los amigos y familia, la carga de asumir solos la responsabilidad económica de un grupo familiar, etc.) se hace más fácil el diálogo, la construcción de género afecta a todos, no solamente a las mujeres.
Y pues, como misionera, me siento satisfecha, porque esto viene a mejorar la atención tanto a mujeres como a hombres.

lunes, 12 de julio de 2010

c'est fini

No me malinterpreten, no hablo francés, pero me encanta esa frase que solía salir de la boca de mi madre a las 3 de la mañana, luego de pasar copiando "el libro del buen declamador" una tarea más que aburrida  y que, increíblemente, todos los profesores de primaria dejaban desde el 4to grado.
El "libro de poemas" o fábulas de Esopo y hasta los mandamientos o similares eran las tareas que yo siempre dejaba para más tarde, me gusta escribir, pero no a mano, así que, cuando al fin lograba terminar, al filo de la madrugada, mi madre exclamaba un c'est fini y yo al fin, me iba a dormir.
Ayer, increíblemente, me dormí durante el segundo tiempo del partido de la final del mundial, desperté a tiempo para ver lágrimas holandesas y sonrisas españolas y para recibir el mensaje que anunciaba que le atiné al marcador de la final (cortesía de mi hijo), se acabó, ya no hay que pensar en madrugadas de futbol, en vuvuzelas y en waka waka cada 15 minutos.
Supongo que lo voy a extrañar, por unos días hablamos del pulpo paul, y cada uno tenía una opinión, pero, no me atacaban por no ir por españa (cada equipo tuvo sus hinchas locales), y al final, uno ganó y la cosa acabó.

Como dice la Ale, quitando la cortina de humo de la temporada, el mundo vuelve a ser lo que era, por unos días más los españoles olvidarán la crisis, la perdida de empleos, los rollos de las autonomías mientas el resto del mundo regresa a sus actividades normales.

Como decían las viejas cadenas nacionales de TV. "continuamos con nuestra programación regular".
saludos.

jueves, 8 de julio de 2010

feminismos exacerbados.

Fui a ver Toy Story 3 y luego leí algunos comentarios acerca de lo "inapropiado" de los personajes y tuve que reconocer que las posiciones exageradamente dogmáticas de algunas feministas también son dañinas.
He visto las 3 Toy Story, y creo que muestran una ENORME evolución en cuanto a películas "infantiles".
Hay un camino enorme que va de Blancanieves a Toy Story, en cuanto a estereotipos y encauzamiento de los deseos e ideales infantiles. Por otro lado, hay que hacer un análisis del uso del marketing en estas películas y cómo pasaron de juguetes "pasados de moda" a tener lo último en juguetes, obviamente, como forma de atraer consumidores.
Los guionistas de Pixar han hecho de todo, trabajaron con un pez discapacitado que es superprotegido por su padre, un tipo intolerante que termina siendo apoyado por su peor pesadilla: una pececita con falta de memoria, en otras palabras: con una discapacidad y tiene que aprender a tener paciencia, a lidiar con su miedo y a respetar las habilidades de su hijo y a las discapacidades de los otros en general.
Se han burlado de nuestros miedos: una RATA que cocina los más deliciosos manjares (¿quien no tiene miedo de una rata en la cocina?¿o asco?) y convirtieron a los monstruos del closet en un peludo divino que, aunque le gustan los niños, no es pedófilo. (¿ algún mensaje subliminal en ese monstruo que necesita salir del closet?), se rieron del carro deportivo sin mente y sin ilusiones, y del "super heroe" que termina en horario de 8 a 5 en un trabajo aburrido, hasta que lo ataca la nostalgia de sus años mozos (¿crisis de los 40?), junto a la esposa que necesita hacer algo más que la cena para sentirse útil.
Así que yo me siento bastante confiada con sus películas, no hay nada que no pueda pasar por el tamiz de mis propias explicaciones y de la contextualización que yo puedo hacer del tema con mi hijo.
Aunque la preocupación de las feministas por las escasas participaciones de personajes femeninos es entendible, a mi me parece que, en general, pixar le ha apostado a la construcción de nuevas identidades masculinas, algo que no está en oposición al feminismo, pero que no ha sido totalmente aceptado por las feministas. (supongo que se debe a que hay más hombres en puestos de dirección en PIXAR, y habría que ver porqué no hay mas mujeres.
Es evidente (al menos para mi) que los personajes masculinos han sido muy cuidadosamente tratados para evitar mostrar los signos clásicos de masculinidad: fuerza, atracción desmedida hacia el sexo opuesto y oposición a la homosexualidad. desde las primeras películas se ha trabajado a los personajes masculinos dotándolos de sensibilidad, en su mayoría son tímidos ante los personajes femeninos y son los "malos", los que hacen uso de la fuerza, o como los tiburones de Nemo, luchan contra su agresividad.
Tal vez no ha habido el mismo cuidado con los personajes femeninos, hay un cierto avance andrógino en donde no son claramente distinguibles los géneros en los personajes principales, pero se apoyan en personajes femeninos a veces "clásicos" (monster's inc) clonados de actrices reconocidas o papeles clásicos,
La incursión de Barbie, -una muñeca más que vendible- en la historia tiene 3 niveles: Mercadológico ( no creo que mattel quisiera perder la oportunidad de venta) Irónico (es una muñeca que funciona a la vez como ícono de moda y sumamente estereotipada) y gancho visual (beach party en la juguetería) en la primera no aparece y en la segunda resulta la típica rubia tonta, en esta tercera, sin embargo, dice la frase más "inteligente" de la película.
Yo entiendo que los medios son decisivos en la construcción social de las personas, pero no son lo único que existe, en comparación con muchos programas de tv. que mi hijo ve diariamente, el poder discutir con mi hijo acerca de la ropa de Ken y la percepción de que está "correcto" o no, es agradable, también el ver como ha evolucionado la industria de las películas infantiles, hasta hacer que a todos nos agraden por igual.
Yo no pido que las películas sean moralistas y educativas y en eso, también formamos criterio. el mundo es así y el arte es reflejo del mundo, prefiero que construya mi hijo sus propios criterio en base a lo que puede ver y no que le pinten un mundo ideal, que no tiene nada que ver con lo que enfrenta diariamente.