domingo, 16 de mayo de 2010

Eco-histeria

Tal vez estoy distraída, la cosa es que no me entendieron el post anterior. Hace algun tiempo Andrés Zepeda intentó hacer lo mismo, decir ¿que pasaría si encuentran oro en Santa Catarina Pinula?, ¿estarían, los dueños de la tierra más cara del área metropolitana, dispuestos a salir de sus casas para que una minera explore y contamine a cambio de algunos gramos de oro?
Sin que me contesten, eso no va a pasar. Aunque lo que si ha pasado es que pretende explorar y explotar el hierro que se encuentra en la arena negra de la costa sur. algo a lo que intenté referirme en el post anterior.
Esta imagen, a la derecha,  ya no puede ser vista en el rio Polochic, los cañeros movieron el cause del río para alimentar sus plantaciones de caña, así que esto está perdido para siempre, me dirán que se ve sucio, es obvio que cuando llueve el río se pone menos transparente.
Cada vez que los campesinos vienen a protestar por la minería y los mega cultivos que dañan la tierra (caña, palma) la gente de la ciudad se enoja y se molesta, ¿acaso no les gusta el progreso? es lo que dicen, asumen que, el escaso empleo que algunos tendrán, y lo que implica en impuestos que no llega al 1% de lo que gana la minera puede cubrir y curar los daños que se generan al ambiente y lo doloroso que se puede interpretar de la pérdida de paisajes y bio-diversidad.
En contraste, Costa Rica acaba de frenar las exploraciones mineras, prefiere invertir en uno de los destinos turísticos de aventura más famosos del continente, con bosques y selvas más accesibles que la amazonia, pero igual de atrayentes.
No es una cuestión de falso nacionalismo decir que tenemos las playas más bellas, cuando todos sabemos que eso no es cierto, incluso las áreas protegidas no están en las mejores condiciones, si decimos que "son bellas" lo hacemos por nacionalismo.
La gente de Lanquin no permitió que el asfalto llegara a su ciudad, prefieren tener carreteras no tan adecuadas y todavía así, la invasión a Champey durante semana santa fue atroz.
Me dicen que el río Cahabón alguna vez tuvo nutrias, yo nunca las vi, y a pesar de todo, la gente que llega a Champey CONTAMINA MUCHO, NO HAY CULTURA DE RESPETO A LA ECOLOGIA.
En contraste está este río, el pueblo viejo, en la cumbre de la sierra de las minas, casi no contaminado cuya belleza aún se mantiene, tal vez porque es difícil que alguien camine las 6 horas que se necesitan para llegar allá, todavía a pie.
En todo caso, lo que importa no es el nacionalismo a ultranza que hace que la gente no reflexione, no es que no me guste mi país, no me gusta lo que la gente le hace a mi país, ¿necesitamos otra bacteria, como en Atitlan, para darnos cuenta que estamos acabando con la naturaleza?
Supongo que, tal vez, intentaré ir a la playa, solo para verla por última vez, antes que los bulldozers y los camiones empiecen a colar y a fundir la arena para aprovechar el hierro.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Hola Paty. Tenía tiempos de no pasar por aquí a visitarte. Pues sí, tal parece que necesitamos poner a la naturaleza al límite, para que hagamos conciencia de que la hemos sobrecargado. Un abrazo y a ver qué día nos tomamos otro cafecito por ahí. Un abrazo,

Patricia Cortez dijo...

Hola Vanessa:
que bien que pasaste, y deberíamos ponernos de acuerdo cuando le baje a las revoluciones.
un abrazo