sábado, 6 de febrero de 2010

¡¡Mátalas!!

Hace unos días se inició una cadena de mails con un artículo de una periodista mexicana, que también reseñaron algunos blogs.
la carta intentaba hacerle notar a Alejandro Fernández, que su canción "nalgadas con penca de nopal" era extremadamente violenta.
Alejandro, en realidad, es un reincidente, ya había cantado antes "Mátalas" en donde insta a los hombres a convertirse en "asesinos de mujeres".
La música ranchera no me es extraña, me gusta, en realidad, y tengo que reconocer que mucha de esa tiene contenidos misóginos y violentos, los cambios sociales que han permitido que las mujeres accedamos a tribunas y espacios, todavía no son introyectados por los hombres como algo beneficioso, sino que les han caído como un balde de agua fría que no saben como manejar.
Yo no creo que el arte, en general, deba ser moralista o "dejar algo bueno", ni que tengan que proyectar "valores", pero reflejan la realidad en la que vivimos, criticar una canción por su contenido es también censura y falso moralismo, porque la expresión artística, así sea esta la más "pupulachera" no hace sino reflejar y presentar la realidad y el contexto en el que se creó, no creo que podamos volver al debate sobre el arte "comprometido" y el que no lo está, sin notar que mucho del arte contemporaneo no tiene la finalidad de evangelizar o convencer.
Antes de masacrar a Alejandro y de dejar de comprar sus discos, o dejar de disfrutar uno de los cuerpos masculinos más interesantes que he visto, veamos el mercado al que está dirigida esta música, así como no ha prosperado ( y no prosperará) la prohibición de los "narco corridos" porque su público es fiel, tampoco esperemos que los hombres dejen de acudir a la música que alaba la violencia, cuando la ley y la sociedad han dejado de hacerlo.
Hace unos días me contaban de una sensibilización en un poblado del altiplano, donde llevaron la noticia de que existía la "ley de femicidio" y la "ley de violencia intrafamiliar" y que prohibía que le pegaran a las mujeres, los hombres exigieron que llegara "un juez, un hombre" a que repitiera estos datos y que llevara consigo las leyes, porque no podían creer que una ley les impidiera pegarles a "sus mujeres", ¿acaso no son estos los hombres que escuchan "mátalas" y se sonrien?.
Sigo insistiendo en la construcción de masculinidades menos violentas, pero hago un recorrido por canales y radios y además de "matalas", los mensajes son dirigidos a reforzar la imagen del "macho que se respeta" y que, por supuesto, tiene "a raya" a "su mujer", desde que le gusta la gasolina, hasta que la mujer del pelotero quiere el bate, la música popular no hace sino contribuir a la construcción del hombre macho, que no se deja y que se siente superior a la mujer.
En la orilla opuesta, desde Lolita de la Colina, la Leona Dormida y Paquita la del barrio han cantado desde el despecho, las características más despreciables del hombre "es un gran necio, un estúpido engreído", en una actitud revanchista que no deja mucho, incluso la canción compuesta por Arjona para Yuri, es más bien una queja que una toma de conciencia y acción.
Callar a Alejandro no hará sino que cambie de lugar la estafeta: desde Agustín Lara, que también tiene letras misóginas, la mujer "diabla" ha servido de fuente de la imaginación y la fantasía masculina, además de mantener la violencia.
Al final, no es la música lo que enerva a un novio que asesina a su novia dormida porque lo dejó para terminar su carrera, es su construcción social y hacia eso es a donde nos dirigimos, educar a los niños y enseñarles que la hombría no se demuestra con golpes, es todo un reto, ¿se apuntan?.

6 comentarios:

Berni dijo...

El tema es muy preocupante.
No podemos permitir ni un gesto más de violencia contra las mujeres, por pequeño y "absurdo" que parezca (eso dicen muchos que defienden la canción de A. F.)

Yo era una admiradora total del Potrillo, y desde que escuché su polémica canción, no he vuelto a poner ni una sola canción suya en casa o en el blog.
Gracias.

http://elrincondeberni.blogspot.com/2009/12/unas-nalgadas.html

La Guera Rodríguez dijo...

Estimada Patricia:

Cierto, se habló mucho de la carta de Gaby Vargas para Alejandro Fernández, pero a pesar de que Gaby tiene toda mi simpatía, acá hay opiniones encontradas y se dice que solo fue con afán de protagonismo -de ella- ya que precisamente hay tantas otras letras de canciones que hablan de barbaridades peores...
En lo personal, solo son expresiones musicales que no tienen porque influir en las acciones de los machos, que tontería! lo grave es que hay muchos que se creen lo que dicen como "obra artistica". Pero coincido contigo sobre las bases de la estructura familiar, donde nace lo importante de la mentalidad de nuestros hombrecitos y mujercitas.

Saludos!

Diana

Patricia Cortez dijo...

Hola Berni, y bienvenida, no es que sea absurdo ni pequeño, es que el arte, en general, no tiene por que ser edificante ni progresista y al final la decisión de oirla o no, es nuestra, nadie puede negar la misoginia de Picasso, y muchos de sus retratos deforman a las mujeres deliberadamente, pero sigue siendo arte, tampoco me atrevería a censurar las meninas porque muestra en todo su explendor la fealdad y los defectos físicos (ahora sería politicamente incorrecto)
Diana:la cosa es al revés, Alejandro es fruto de su entorno, su sistema patriarcal y machista que mamó y disfrutó, no digo que no influyan, pero no son determinantes, lo determinante es que la madre de Alejandro ha soportado estoicamente las miles de amantes de Chente sin proferir palabra, supongo que también uno que otro cachetazo y en eso los medios no se han metido nunca, la violencia, también se mama.

Miss Trudy dijo...

Yo no creo que todo arte debe de ser edificante, pero tampoco debe de servir a propósitos de violencia y dominación brutal. Me pregunto si Fernández tiene hijas y que le parecería que se considerase aceptable matarlas por que quieren seguir su carrera e incluso, en el peor de los casos, si fueran infieles a sus parejas. Me pregunto, también, cuanta aceptación tendría una canción por una artista mujer propagando la idea de que hay que matar a los hombres, como cuestión de honor. Debieran de tener parámetros como tienen en EEUU, que las canciones violentas tienen que ser marcadas como violentas en sus carátulas y no se pueden tocar tal cual en las radios populares. Hay que recordar que desafortunadamente, el arte también es didáctico, también contribuye a "educar" a su público.

Patricia Cortez dijo...

La verdad, Miss Trudy, yo difiero de eso, el arte puede usarse como medio didáctico, pero su finalidad no es esa, la expresión artística, hasta la más naif o pupular, tiene un origen intrínseco, al final, podemos usarlo con fines didácticos, pero esa no es su finalidad, al menos, yo no escribo mis cuentos y novelas para educar, a menos que deliberadamente lo haga así, en estos espacios.
gracias por leer

Anónimo dijo...

Yo si no estoy de acuerdo con ese tipo de canciones pues subconcientemente crean una idea equivocada.

Me molestan los anuncios donde se trata a la mujer como un objeto y cuando ya le pones letrita así a una canción me irrita mas.

Lo he dicho antes, yo conozco estar con un abusador y realmente esas cosas hacen la idea que ellos están bien y tu como mujer estas mal.

Un tema sensible para mí, pero cuesta mucho salir de esas concepciones patriarcales abusivas y la burla de nuestros derechos mediante bromitas hieren.

El tambien se burlaba de mí... y era abusivo de forma comica... así con unas nalgadas con nopal y por eso no estoy de acuerdo.